El vino es otra de las grandes riquezas de la provincia de Cádiz, que cuenta con dos rutas claramente diferenciadas: La del Vino y el Brandy de Jerez y la de los Vinos de la Sierra de Cádiz. La primera más visitada que la segunda, que no por ello es menos importante.

La ruta del Vino y el Brandy de Jerez

La ruta del Vino y el Brandy de Jerez comienza en Chiclana y pasa por Puerto Real, El Puerto de Santa María, Rota, Chipiona, Sanlúcar de Barrameda, Trebujena, algunos pagos de Lebrija y, cómo no, Jerez de la Frontera. Un paseo por unas poblaciones con un paisaje y una riqueza cultural y patrimonial impresionante. Una belleza, que en sus distintas vertientes, se puede palpar tanto en la campiña jerezana, como en las marismas o en las preciosas playas de las ciudades costeras. En esta ruta se producen algunos de los mejores finos, olorosos, manzanillas, vinagres y brandis del mundo. Casi nada.

Esta ruta abarca la denominación de origen Jerez-Xérès-Sherry, Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda, Vinagre de Jerez y la Denominación Específica Brandy de Jerez. Las más de 10.000 hectáreas de viñedo del Marco de Jerez conforman un valioso patrimonio para esta zona, donde se crían variedades de uva como la Palomino o la Pedro Ximénez, con las que se producen vinos generosos, totalmente secos, como el fino, el oloroso, el amontillado, y el palo cortado. Aunque no son los únicos caldos que se pueden degustar en estas poblaciones. En Jerez también se produce brandy, en Chipiona y Chiclana se produce moscatel y en Sanlúcar, junto al Guadalquivir, se puede degustar la manzanilla, un vino que es originario de esta zona. Los vinos generosos se pueden mezclar con vinos dulces, dando lugar a otros caldos como el palecream, el médium y el cream.

Hablar de la Ruta del Vino de Jerez es hablar de playas, marismas, flamenco y, por supuesto de una gastronomía exquisita. El visitante que vaya a alguna de estas poblaciones no puede irse sin probar el pescado de Sanlúcar, El Puerto o Rota, ni los productos de la huerta de Trebujena, Lebrija o Chipiona, ni los quesos y aceites de poblaciones de la Sierra de Cádiz, como Villaluenga del Rosario. Un buen momento para degustar los productos de la tierra es durante alguna feria. Destacan la de Sanlúcar (mayo-junio), dedicada a la manzanilla; la de Jerez (mayo), dedicada al caballo; la de El Puerto (mayo), al vino fino; o la de Trebujena (agosto), dedicada al mosto.

Una de las claves de los caldos que produce esta tierra es el proceso de producción, que tiene cientos de años de antigüedad. Los vinos de Jerez, criados en bodegas, envejecen en botas de roble americano. En la ciudad jerezana también se “da a luz” a brandis, una bebida que se obtiene a partir del aguardiente sometido al proceso de "criaderas" y "soleras". El vinagre de Jerez, que cuenta con su propio Consejo Regulador (el único en España) es conocido en el mundo entero y es ideal por sus propiedades culinarias.

Jerez, epicentro de esta ruta, destaca por su tradición bodeguera, que impregna el espíritu de la ciudad, así como el flamenco y los caballos, que conforman el triángulo mágico de una ciudad centenaria. Monumentos como el Alcázar o sus numerosas edificaciones religiosas hacen de Jerez una ciudad digna de visitar. A escasos 20 kilómetros está la pequeña localidad de Trebujena, famosa por su mosto y por las angulas, que hasta hace unos años (ahora está prohibido) se pescaban en el cercano río Guadalquivir.

En Sanlúcar, situada frente al Parque Nacional de Doñana, hay también bodegas de prestigio como las de Barbadillo o La Guita.

El Museo Barbadillo de la Manzanilla que fué inagurado en el año 2002, mantiene sus puertas abiertas a todo aquel que quiera contemplar todos los aspectos relacionados con el vino del Marco de Jerez, desde el delicado proceso de la crianza, hasta el embotellado y la posterior comercialización. Podrás ver la evolución que ha sufrido la manzanilla a lo largo de los tiempos, desde que la familia Barbadillo realizó su primer embotellado en el año 1821, hasta las elaboradas manzanillas que se procesan la actualidad. El museo se encuentra ubicado en un edificio de dos plantas que data de principios del siglo XIX, donde podrás realizar degustaciones, ver la maquinaria usada para la elaboración de los productos e incluso disfrutar de una sala de audivisuales.

En la Costa Noroeste (de la que forman parte también Trebujena y Sanlúcar), están Chipiona y Rota. La localidad chipionera destaca, además de por su mencionado moscatel, por tener el faro más alto de España y por contar con playas de arena fina a las que peregrinan cada verano miles de turistas.

En Rota se produce la tintilla, un vino que se elabora a través de uvas maduras y que es una verdadera joya enológica. En El Puerto se encuentran bodegas tan señeras como la de Osborne, Terry o Luis Caballero.

La ruta de los Vinos de la Sierra de Cádiz

La otra Ruta del Vino de la provincia, la de la Sierra de Cádiz, comprende los municipios de Arcos de la Frontera o Prado del Rey. En Arcos se producen vinos tintos y vinos blancos de mesa bajo la denominación de vinos Tierra de Cádiz. Bodegas como Regantío Viejo, Páez Morilla, Taberner y Bodegas Rivero, forman parte de esta ruta. El municipio arcense forma parte también de la Ruta de los Pueblos Blancos de la Sierra de Cádiz, que la componen un total de 19 poblaciones, a cual más bella, entre las que destacan Bornos, Espera, Ubrique o Grazalema. Arcos es peculiar por su geografía, ya que está ubicada en una peña desde la que se pueden presenciar unas excelentes vistas. El balcón de Arcos, declarado monumento natural de Andalucía, está en la plaza del Cabildo y es la “ventana” al exterior de esta ciudad, que está rodeada por huertas, vid, olivos y una presa, que se intentó utilizar en la década de los 60 como reclamo turístico realizando deportes naúticos, pero ahora esta zona ha quedado como segunda residencia.

Tanto la Bodega Regantío Viejo de Arcos como las Bodegas Rivero de Prado del Rey ofrecen visitas guiadas y alojamientos a sus visitantes, que se adentrarán así en la idiosincrasia de dos poblaciones que destacan por sus buenos caldos y variedad gastronómica.

Información práctica » Horario del Museo y tienda de Barbadillo
   De Martes a Sábados (10:00h a 15:00h).
   Domingos de 11:00 h. A 14:00 h.
   De Septiembre a Mayo, todos los Miércoles de 10:00 a 18:00 h.

» Visitas guiadas a las Bodegas Barbadillo
   Martes a Sábado: A las 11:00hrs. en Inglés  A las 12:00 hrs. en Español  A las 13:00 hrs. en Español.
   Domingos (meses de invierno): 12:00 hrs. en Español.

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